El semen es uno de los fluidos más potentes que posee nuestro cuerpo. Necesario para conseguir un embarazo, sus características no dejan de ser objeto de estudio. Gracias a estos estudios, podemos conocer, cada vez más, muchas de las particularidades que lo caracterizan.

Si bien es cierto que un semen de dudosa calidad no afecta para disfrutar de unas relaciones sexuales plenas y satisfactorias, posee sus consecuencias cuando nuestro objetivo va más allá de disfrutar. Agrandar la familia es la meta de muchas familias que descubren, cuando se despojan de los métodos anticonceptivos, que la infertilidad se ha instaurado en sus días.

Hablar de este tema es crucial para encontrar soluciones a este problema. Existen tratamientos naturales que pueden ayudarnos en nuestro objetivo. La ciencia también tiene opciones para nosotros. Sea como sea, empezar por conocer algunas curiosidades del semen puede ayudarnos a allanar el camino hacia la consecución del embarazo.

Con esta intención recopilamos, a continuación, 8 curiosidades del semen que probablemente no sabías, pero que ayudarán a comprender mejor su manera de funcionar y sus procesos.

¡Toma nota!

5 curiosidades del semen que no sabías

El semen se considera el líquido mágico del cuerpo masculino, pues es capaz de iniciar uno de los procesos más alucinantes de la humanidad: la creación de una nueva vida. Ante esto, son muchos los estudios que han intentado arrojar más información sobre las características de este elemento y sus procesos.

Sabemos que el semen está compuesto por espermatozoides, que solo pueden ser avistados con la ayuda de un microscopio, debido a su diminuto tamaño. La fertilidad masculina dependerá de la salud y el volumen de estos pequeños espermatozoides, que saldrán del cuerpo del hombre en busca de un óvulo que fecundar. Para ello, será necesario que se produzca un encuentro sexual entre el hombre y la mujer, y que el líquido acceda directamente al interior del sistema reproductor femenino.

Aunque la ciencia nos ha aportado mucha información respecto a este proceso, los últimos hallazgos que conocemos nos informan de que, evidentemente, son muchos los detalles que todavía no sabemos. Algunas de las curiosidades con las que cuenta son las siguientes:

El semen se produce en la pubertad

No, a diferencia de lo que algunos piensan, el hombre no tiene semen en el momento de nacer. Es en la pubertad cuando las hormonas adquieren la maduración necesaria para poder fabricarlo. A partir de entonces, puede darse el embarazo, aunque éste dependerá de la calidad del esperma y del óvulo femenino.

Esta maduración suele producirse entre los 12 y los 14 años, a partir de la cual puede darse la espermaquia o primera eyaculación masculina. Este fenómeno solo nos indica que el cuerpo ha obtenido la maduración suficiente, pero no es sinónimo de una buena fertilidad. Va acompañado de cambios físicos que pueden ser perfectamente visibles en el crecimiento, en los músculos y en el pene, entre otros.

2-No solo se fabrica en los testículos

Aunque los testículos tienen una gran importancia a la hora de producir y almacenar el semen, este no solo se produce aquí. La próstata y las vesículas seminales tienen, también, un importante papel. Es por ello que son muchos los hombres que pierden la fertilidad tras una intervención quirúrgica de próstata.

3-No todo el semen está formado por espermatozoides

A diferencia de lo que se suele pensar, no todo el semen está formado por espermatozoides; la concentración es inferior al 10%. Existen otros elementos que están presentes en el líquido seminal, que también facilitarán a la consecución del embarazo, aunque indirectamente. Elementos calcio, minerales y otras encimas, cuyo papel se basa en mejorar el movimiento del esperma dentro del cuerpo masculino, así como su paso al cuerpo femenino.

Se estima que tan solo un 1% del líquido seminal es esperma. Esto permite darnos cuenta del enorme potencial que tienen los espermatozoides, pudiendo llegar a crear vida con tan poca concentración.

4-No todos los espermatozoides son válidos

Como hemos visto, tan solo el 1% de líquido seminal contiene esperma. Dentro de esta proporción, además, encontramos que no todos los espermatozoides son válidos. Se estima que un 30% del esperma expulsado en cada eyaculación no funciona, por lo que no puede contribuir a la consecución de un embarazo.

De esta manera, un hombre expulsa entre 200 y 400 millones de espermatozoides en cada eyaculación, pero tan solo 150 millones pueden ser los válidos, en caso de no existir ningún problema de infertilidad a la vista.

5-Su consistencia cambia en función de algunos factores

Son muchos los hombres que se han dado cuenta; algunos de ellos, incluso, han considerado necesario acudir al médico por ello, aunque no suele tener consecuencias graves. En algunas ocasiones, podemos notar consistencias diferentes en nuestro líquido seminal, pudiendo ser más espeso o más líquido. Esto depende de la cantidad de hidratación que posea el organismo en el momento de la relación sexual.

Sea como sea, generalmente un esperma espeso puede contener más espermatozoides no válidos que un esperma líquido. No obstante, si nuestro esperma no es siempre espeso, no debe dar lugar a una mayor preocupación.

6-La dieta del hombre puede modificar el sabor del semen

Aunque lo hace ligeramente, existen algunos alimentos que, si están integrados en la dieta, pueden producir alteraciones en el sabor del semen. Estos alimentos son el perejil, el apio, la piña, la canela, la papaya o la naranja.

No obstante, este cambio de sabor no tiene nada que ver con la capacidad de concebir, por lo que no resulta significativo a la hora de buscar fines reproductivos.

7-Los espermatozoides pueden sobrevivir hasta 5 días en el cuerpo de la mujer

Aunque es cierto que un espermatozoide muere si sale a la superficie, su vida se alarga mucho más cuando pasa de manera directa al cuerpo femenino una vez ha sido eyaculado. Lo normal es que su supervivencia se alargue unas 48 horas, aunque en algunos casos, puede sobrevivir hasta 5 días.

En todo este tiempo, siempre y cuando la mujer sea fértil, puede producirse la fecundación del óvulo. Es por ello que la fecundación no solo puede producirse en el momento en el que se produce la relación sexual; también durante el tiempo que el esperma permanece vivo por su interior. Es posible, por tanto, que la fecundación se produzca hasta 5 días después de haber tenido relaciones sexuales.

8-La ropa ajustada puede afectar a la supervivencia de los espermatozoides

Los espermatozoides necesitan tener libertad para poder sobrevivir, aún cuando todavía permanezcan en el cuerpo masculino. Es por ello que la ropa ajustada, así como los deportes en los que los testículos sufren constantes roces, pueden empeorar la salud del esperma.

Estas curiosidades nos pueden ayudar a conocer algunos datos interesantes sobre los espermatozoides que pueden arrojar un poco de luz en esos momentos en los que parece que el embarazo se resiste. En esta situación, contar con un plan personalizado de fertilidad puede ser de especial ayuda para recorrer un camino exitoso hacia la reproducción natural. Fertilidadmasculina.org te ofrece tu plan de fertilidad y estilo de vida masculina totalmente gratuito, incluyendo recetas y un plan de alimentación especialmente destinado a mejorar la vida de los espermatozoides y acercarte a tu objetivo de manera definitiva.