Nuevo enfoque en preservación de la fertilidad

Imagine que le diagnostican una enfermedad que cambia la vida. Ahora imagina que te digan que debido a tu enfermedad no puedes tener hijos, antes de haber pensado siquiera en formar una familia propia. Esto ya no es el caso de muchos pacientes gracias a la preservación de la fertilidad. Se trata de procedimientos que ayudan a los pacientes a conservar su fertilidad a pesar de los efectos de una enfermedad o de su tratamiento.

Métodos de Preservación de la Fertilidad

Para Mujeres

Para Hombres

Publicación de Nuevas Directrices para la Preservación de la Fertilidad

La Sociedad Británica de Fertilidad destacó la importancia de la preservación de la fertilidad en un conjunto de nuevas directrices presentadas en la reunión de Fertilidad 2018 en Liverpool. Esto se aplica a las personas a las que se les asigna una mujer al nacer. El Profesor Adam Balen, Presidente de la Sociedad Británica de Fertilidad, dijo: «Nuestras directrices están diseñadas para ayudar a nuestros miembros y a la comunidad de la fertilidad en general a decidir el mejor curso de tratamiento, en consulta con estas pacientes»^[1]British Fertility Society. Fertility preservation: now is the moment to take action. 2018. Available from: … Continue reading.

Estas directrices se presentan en un artículo publicado en enero de 2018 por Ephia Yasmin de University College London Hospitals y sus colegas^[2]Yasmin E, Balachandren N, Davies MC, Jones GL, Lane S, Mathur R, Webber L, Anderson RA. Fertility preservation for medical reasons in girls and women: British Fertility Society policy and practice … Continue reading. El documento aborda las condiciones de salud que pueden afectar la fertilidad y las técnicas de preservación de la fertilidad.

¿Qué Puede Afectar su Fertilidad?

Cáncer

Las mujeres diagnosticadas con cáncer pueden experimentar una reducción de la fertilidad debido al tratamiento del cáncer en sí. Esto puede incluir quimioterapia, radioterapia y cirugía. El efecto del tratamiento sobre la fertilidad de la mujer depende del tratamiento específico. Esto significa, por ejemplo, el fármaco quimioterapéutico exacto utilizado o la dosis y el lugar de la radiación.

Lamentablemente, este problema afecta a un número cada vez mayor de mujeres. Esto se debe a que cada vez es más común retrasar el embarazo hasta más tarde en la vida, después de encontrar una carrera estable. Pero esto aumenta la probabilidad de desarrollar cáncer antes de que usted haya podido tener hijos.

Condiciones Benignas

Además del cáncer, otras enfermedades no malignas también afectan a la fertilidad debido a su tratamiento y no a la enfermedad en sí. Estos incluyen el lupus eritematoso sistémico (LES) que los médicos pueden tratar con ciclofosfamida. Pero este tratamiento puede causar amenorrea, que es la ausencia de períodos menstruales. Otras afecciones son la anemia drepanocítica, la anemia aplásica y las enfermedades mieloproliferativas.

Además, las pacientes que se someten a cirugía pélvica probablemente se verán afectadas por la reducción de la fertilidad. Las pacientes pueden necesitar someterse a esta cirugía debido a endometriomas y grandes quistes dermoides ováricos.

Condiciones Genéticas y Metabólicas

Por el contrario, las mujeres con afecciones como el síndrome de Turner y la galactosaemia pueden estar en riesgo de reducción de la fertilidad a causa de la enfermedad en sí, en lugar del tratamiento. En el síndrome de Turner, una mujer joven no puede producir sus propios óvulos. Sin embargo, podrá llevar un bebé a término. Los médicos han encontrado una solución potencial a este problema inusual. Las madres de niños con síndrome de Turner pueden donar sus propios óvulos para congelarlos. Su hija puede usar estos huevos cuando sea el momento adecuado para formar una familia.

Personas en Transición

Además, el estudio destaca la importancia de asesorar a las personas en su transición del género femenino al masculino. La congelación de óvulos, embriones o tejido ovárico puede ayudar a las personas a tener la opción de convertirse en padres genéticos o biológicos a través del embarazo o la gestación subrogada.

El Dr. James Barrett del Charing Cross Hospital dijo: «El número de personas que se presentan con disforia de género ha aumentado rápidamente en la última década. Sin embargo, la provisión constante de fondos del NHS para la preservación de la fertilidad para este grupo aún no se ha puesto al día. Mi clínica atiende a alrededor de la mitad de las pacientes que son remitidas por dificultades con la identidad de género en el Reino Unido y, aunque hablamos con ellas sobre la fertilidad futura, no siempre pueden autofinanciar los procedimientos necesarios y el almacenamiento continuo de material. La infertilidad es una enfermedad real y es muy frustrante que todo el NHS no siempre pueda ayudar a nuestros pacientes con esa parte de sus vidas».

Pero, ¿estos avances ayudarán a las personas que más los necesitan?

En el Reino Unido, el National Institute for Health and Clinical Excellence (NICE) realizó actualizaciones prometedoras de sus directrices en 2013. Los cambios incluyeron una recomendación de que los criterios estrictos para el tratamiento de la fertilidad del Servicio Nacional de Salud no se aplicaran a las mujeres que necesitaban preservar la fertilidad, y que no se aplicara el límite de edad más bajo.

Sin embargo, en realidad esto se ve eclipsado por varias limitaciones. Esto implica que el poder está en manos de los Grupos de Comisión Clínica (CCGs) locales para asignar los fondos. Esto puede limitar el acceso de las personas a los últimos avances clínicos. Además, si aumenta la adopción de estos métodos de preservación de la fertilidad, habrá una necesidad aún mayor de un servicio nacional coordinado para el almacenamiento y el acceso a los óvulos, los embriones y el tejido ovárico.

Este es un campo apasionante y las últimas directrices muestran un gran salto hacia una mayor comprensión de la preservación de la fertilidad y de las opciones disponibles para los pacientes. Sin embargo, hay que trabajar más para poder aplicar estas directrices de forma coherente, de modo que más pacientes se beneficien.

BIBLIOGRAFÍA